lunes, 28 de septiembre de 2009

Garranchu

TORNA LA VIDA
TORNAS LA RUEDA
MIENTRES RÚA LA RUECA, AL JILAR, ES LA TU VIDA PASAR.
TORNA LA VIDA
TORNAS A LA MAR
MIENTRES DEJAS ESCLAVES DE SAL, VES LA TU VIDA AL PASAR.


COMU UN GARRANCHU QUE MOS QUEDRÍA SALPICAR
COMBLÁU D`ESPUMA, BLANCU DE LUNA, ESPEJU DE LA MAR.
COMU UN GARRANCHU QUE MOS QUEDRÍA ASGANZAR
COMBLÁU DE VIENTU, DE FRESCU ALIENDU, ESPEJU EN QUE MIRAR.



Si entras en nuestro myspace http://www.myspace.com/garmafolk podrás escuchar esta canción que abrirá nuestro tercér disco. Garranchu (gran ola marina, en cántabru) es una melodía de Bruno y la letra es de Míguel.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Pilar en La Concha de Villaescusa

Durante la gira de villancicos cántabros del año pasado -del repertorio de nuestro disco LLAR- tomamos esta instantanea en la casa de cultura de La Concha en Villaescusa. Pronto nos pondremos a los conciertos navideños.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

¡Qué miedo!

Resulta que Míguel ha decidido aportar su granito de arena al blog y, va a escribir algún post. ¡Échense a temblar!
http://nellabarientu.blogspot.com/

domingo, 13 de septiembre de 2009

San Abagán. Ruilobuca 12/9/09

Ayer fue una jornada especial, tocamos "en casa" y, eso siempre es especial, pero no era esa la razón de la excepcionalidad del día o del concierto. Ayer se retomó la celebración de la fiesta popular de San Abagán, tras un paréntesis de 25 años.

San Abagán no es un santo, es una invención, es una excusa, es una manifestación de alegría de las gentes de Ruilobuca y, por extensión, del resto del valle de Ruiloba. Todo comenzó hace muchos años, Toñín el zapateru empezó con una chocolatada para todos los críos del pueblo y, año tras año, la cosa fue creciendo en participación, colaboración y actividades, hasta convertirse en un encuentro para compartir la buena vecindad y la amistad. Ayer, se recuperó el espíritu de San Abagán y se superó. Se superó de tal forma que la braña de la fiesta quedó pequeña.

Niñ*s corriendo por las calles de Ruilobuca, la cachapera del bar animada e ilusionada con la llegada de los tolanos y tolanas -de nacimiento y de adopción-, los residentes y los que tuvieron que marchar. Las carrozas de la fiesta de El Mozucu rodeaban el moriu de piedra de la campa. Tres gallos -uno pedrés, otro coloráu y el tercero blanco- daban la nota subrealista, paseándose entre la gente sin el menor temor y con despaciu. La leche para la chocolatada, lo dió un ganadero del pueblo, el chocolate lo puso una vecina, los pinchos fueron aportación de un bar, un puesto de comercio justo de unos vecinos de Udías explicaba las ventajas de comprar a los propios productores, otros vecinos aportaron flores, otros pusieron caramelos, otros pusieron tortillas, etc., etc. El ayuntamiento puso el templete y la conexión eléctrica, lo demás, surgió de la gente.

Tocamos a las 20:10 horas. Se nota que nos conocen y que nosotr*s estamos cómod*s. Cuando llegó la hora de hacer varios bailes, casi no había sitio para desarrollar los corros. Desde el escenario éramos testigos de una escena guapa e ilusionante. Hacia el final del concierto se hizo homenaje a las familias de los antiguos organizadores de la fiesta, ya desaparecidos. Fue un momento emocionante.

Tras el concierto de Garma, el desconcierto... la sorpresa: instalaron una especie de ruedo con las talangueras móviles de una ganadería y, soltaron dos vaquillas (en cada una de ellas iban disfrazados dos mozos) y salieron a su encuentro cuatro fornidos "toreros" del pueblo. La risa y la alegría afloró y, cuando surgió de entre el público una ambulancia hecha con un carro de caballo, que se llevó a "los toros", hubo carcajadas generalizadas.

Una parrillada y la música de Nacho Barquín fue colofón... que duró hasta la madrugada. Genial. El año que viene más... y mejor ¡seguro!

jueves, 10 de septiembre de 2009

Virgen de Valencia - Vioño de Piélagos

Fue el día 8 de septiembre, martes, a las 18:00h.
¡Que fiesta tan bonita! con tantas familias comiendo juntas, jóvenes coqueteando, niños jugando...
El concierto fue en el escenario pequeño, después de la actuación -estupenda- del grupo de danzas del Barrio Covadonga de Torlavega. Poco a poco se fue llenando el espacio entre el escenario y la mesa de nuestro técnico. Había todo tipo de gente, desde los más mayores hasta los más pequeños.
Un chaval en una silla de ruedas aplaudía al ritmo de la música mientras un bebé movía sus piernitas. Dos chicas bailaban y unos chicos las observaban. Una abuela con su nieto, atentos a cada movimiento nuestro, esbozaban una sonrisa hermosa, conforme se desarrollaba el tema.
El concierto se calentó con las danzas, que sirvió de palanca para que el publico se moviese hasta el final. ¡Estaba bonito de se ver!
Después, viejos y nuevos amigos se reunieron con nosotros al pié del escenario. Un gustazo. Salimos de allí con las pilas
cargadas, agradecidos por la forma con que nos recibieron. Nos gustaría volver...!

lunes, 7 de septiembre de 2009

Fuentidueña de Tajo - 5 de Septiembre



Después de aproximadamente 5 horas de viaje, llegamos a Fuentidueña a las 18:20h. Nos esperaba un calor impresionante, que ya en la prueba de sonido notamos como nos alteraba, al notar que los instrumentos ¡estaban por las alturas! Desde la prueba de sonido hasta el concierto (pasaron unas 3 horas) a cada tanto nos dedicábamos a chequear la afinación.
La plaza estaba a rebosar de gente de todas las edades. El viento había cesado un y ya no entraba por los micros, queriendo ser otro integrante del grupo. Durante todo el tiempo el publico dio muestras de estar disfrutando tanto como nosotros. Se agradece tener buen equipo de sonido, un técnico competente que nos dejó a gusto y nos hizo sonar bien -quitando la alboka, que nos dio un poco guerra (¡cosas del calor y doble caña!)-.
En las danzas, me encantó ver tanto niños deseando hacer parte del Circulo Circasiano y bailando el vals del Río Verde.
La anecdota del viaje fue sin duda la dificultad de volver del concierto a Madrid y, encontrar la casa que nos dejaban para pasar la noche. Habrá que volver más veces para acostumbrarnos... ¡Están locos estos romanos!