sábado, 14 de enero de 2012

Viernes 13 en Cueto


Con ese título tan cinematográfico, pero sin ninguna connotación terrorífica, os comentaremos un poco la actuación en el CAD de Santander, situado en la calle Arriba de Cueto. La zona que acoge las tres torres de este Centro de Atención a la Dependencia es un lugar con unas vistas extraordinarias a los montes pasiegos, y en el lado opuesto, Peña Sagra y parte de los Urriellos, sin olvidar la vista a la parte "trasera" de Santander (¡¡Santander, ese mundo ignoto!!), la zona de La Llama, Los Castros y G. Dávila. Se nota que pisamos poco la capital de Cantabria.


Llegamos al centro a las 15:30 para montar equipo y probar sonido, con tiempo y calma, como nos suele gustar. El acceso al salón de actos es fácil, debido en parte a que se ubica en la primera planta, y al hecho de quedar cerca del aparcamiento de carga/descarga. Nos encontramos con la prueba de sonido terminada hacia las 16:30, es decir, una hora entes del concierto. Tuvimos la visita de César Higuera, El chaval de Cobeju, rabelista y cantante en los escenarios y hombrereparalotodo en el centro. Aprovechamos esa hora para descansar un rato y tomarnos un cafetucu en la cafetería, departiendo entre nosotros y con residentes que se acercan y echan una parlauca.


Hacia las 17:15 anunciaron por megafonía que se aproximaba la hora del concierto, siendo Jose Luís, recepcionista del centro, el encargado de hacer los comentarios jocosos sobre la actuación: "No se pierdan la actuación de estre grupo de folk sin par, sexy y de gran calidad", "Aprovechen a bajar en orden y sin avalanchas ni empujones en los ascensores, den una buena imagen del centro" o, por último, "Por favor, Manolo el de la sidra, que se presente en el salón de actos para servir el refrigerio después del concierto". Los anuncios fueron acogidos con risas entre usuarios/as y trabajadores/as.


Dimos comienzo al concierto a su hora, a las 17:30. Repasamos temas navideños y algún tema de Cambalúa, por aquello de haber pasado ya el tiempo de adviento. De bis tocamos Si subes a Puentenansa y, tras recoger equipo e instrumentos, tomamos una sidra, que previamente trajo Manolo, el de la sidra.

lunes, 2 de enero de 2012

Despedimos el año en Ruiloba

Con esta entrada, que hace el número 100 en el blog, damos la bienvenida al nuevo año. Este 2012 que nos presentan como un año de recortes de presupuestos... y derechos, puede ser un buen año para desarrollar proyectos con más tiempo... pero eso lo dirá el propio tiempo.


De momento, y para ir paso a paso, comentar el concierto que ofrecimos el día 30 en la iglesia de Ruiloba. En la foto, aparecemos mientras realizamos la prueba de sonido. Este año, y en un juego de palabras, el templo estaba templado. Ello, gracias a las estufas aportadas por el ayuntamiento para caldear el espacio, cosa que agradecimos músicos, técnicos y público en general.


Llegamos a las 5:30 de la tarde para meter todo el equipo de micrófonos, pantallas de sonido, cables y luminotecnia. Montamos todo y a las 6:30 empezamos la prueba de sonido con Marcos Gómez al frente del equipo. Estuvimos un rato, quizás tres cuartos de hora, quizás menos. Cuando salimos a la calle, era de noche y nos acercamos al bar-restaurante El Ocho, que está frente del templo. Tomamos algo e hicimos tiempo hasta la hora prevista del concierto, las 8 de la tarde.


Comenzamos el concierto con cinco minutos de retraso, eso que eufemisticamente se llama cortesía y que supone una descortesía para la gente puntual... cosas del lenguaje y de las costumbres. El público es conocido y muy cercano. Fisicamente se encuentran muy cerca de nosotros y, sobre la línea que ofrecíamos, Didio grabando todo el recital. Acabado éste, nos pidieron un bis que, para esta ocasión, decidimos interpretar nuestro tema inédito "Ramón del alma mía", por aquello de tocar en casa.

Tras el concierto y de recoger todo, tomamos algo y nos deseamos un buen 2012, cosa que hacemos extensible a tod*s nuestr*s lector*s y seguidor*s. ¡¡¡GÜEN AÑU!!!